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Cómo elegir guantes de ciclismo para invierno

Las manos y los pies son la pesadilla de muchos ciclistas en invierno, porque no es fácil mantener una temperatura de confort. El uso de guantes es imprescindible, pero también es importante elegir los adecuados.

Cómo elegir guantes de ciclismo

En los días frescos de primavera y otoño, o en el invierno de las zonas más templadas, nos bastará con unos guantes largos ligeros que eviten el contacto directo del viento y ofrezcan una protección térmica ligera. El aire aún no es frío y el calor generado por nuestra propia actividad será suficiente para mantener las manos calientes. La prioridad será conseguir una máxima transpiración, para evacuar el sudor.

Pero, cuando hace frío o llueve, si no recurrimos a guantes con una protección adecuada, podemos convertir las salidas en una auténtica tortura. Con el frío excesivo, podemos sufrir el intenso e incómodo dolor en las puntas de los dedos que casi todos los ciclistas hemos sufrido alguna vez, e, incluso, llegar a perder la sensibilidad necesaria para frenar, con el riesgo que esto supone. Lo más recomendable es utilizar guantes equipados con membranas que nos protejan del viento o de la lluvia, según el caso, pero siempre con una buena transpirabilidad, para evitar la incómoda sensación de calor y sudoración excesiva.

Cómo funcionan los guantes de invierno

Como el resto de las prendas técnicas de invierno, los guantes se basan en el sistema de capas para conseguir la regulación térmica adecuada y aislar nuestras manos de las inclemencias exteriores. Es más efectivo utilizar dos o tres capas finas de distintas características que una sola capa gruesa. Estas capas superpuestas aportan mayor aislamiento, debido al aire que se almacena entre ellas y, dependiendo de la prenda, podremos añadir o quitar capas, según la temperatura o las condiciones meteorológicas Si queréis saber más, en este otro artículo analizamos ampliamente el Sistema de capas en el ciclismo.

En el caso de los guantes, aunque hay modelos con capas separadas, la mayoría suelen llevar las capas en una sola prenda y sin ofrecer la posibilidad de ir retirándolas o añadiéndolas según varían las condiciones. Por eso es más importante aún elegir correctamente. Lo habitual es que lleven tres capas:

  • Una primera capa de protección térmica en contacto con la piel, que es la que mantiene la temperatura corporal. Su gramaje o perlado dependerá del rango de temperatura de confort que persiga el modelo. Hay numerosos tejidos con distintos niveles de protección térmica y los más habituales, entre los guantes para temperaturas extremas, son Thinsulate®, Primaloft®, y Polartec®
  • La membrana aislante y transpirable, que nos va a proteger contra el viento e incluso contra el agua, en algunos casos. Las más conocidas son el impermeable Gore Tex® y el cortavientos Windstopper®, que ha evolucionado a Gore Tex Infinium®, en su versión más reciente. Pero hay otras membranas desarrolladas por otras marcas de excelente calidad.
  • La capa externa, cuya composición varía según la parte de la mano. En la palma se suelen utilizar pieles naturales o sintéticas hidrorepelentes, con propiedades antideslizantes y almohadillados en los puntos de apoyo. En el dorso, se utilizan materiales resistentes para garantizar la durabilidad. Siempre suelen incluir insertos de gamuza o felpa, que nos sirven para limpiarnos el sudor y otros fluidos, y zonas sensibles a las pantallas táctiles, para poder manipular teléfonos y dispositivos GPS con los guantes puestos.

Según la combinación de estas capas, podemos encontrar guantes para afrontar distintos rangos de temperatura y condiciones de humedad: frío moderado, frío intenso y frío extremo, y, en todos los casos, con la posibilidad de lluvia. A continuación, analizamos los guantes recomendados para cada una de estas condiciones, si bien, hay que tener en cuenta algunas consideraciones:

  • La sensación térmica baja con respecto a la temperatura ambiental, practicando ciclismo, por el efecto de refrigeración que supone ir en movimiento a alta velocidad.
  • La resistencia al frío es muy subjetiva y personal. Hay ciclistas que soportan temperaturas realmente bajas sin problemas en las manos, y a otros les resulta muy difícil combatirlo, incluso con guantes de protección extrema. Estas diferencias, entre otras causas, pueden estar relacionadas con la circulación sanguínea, que es el principal mecanismo de termoregulación de nuestro cuerpo.
  • La modalidad de ciclismo practicada también es importante. En ciclismo de carretera las manos suelen sufrir más frío, porque permanecen más estáticas, pero se necesita menos sensibilidad, por lo que se pueden usar guantes más gruesos. En disciplinas como el Enduro, se necesita mayor sensibilidad para el control de la bici y las manos tienen mayor actividad, por lo que se suele optar por guantes más ligeros y palmas con mucho tacto.

Estos tres aspectos pueden influir para decantarnos por uno u otro modelo, para buscar mayor o menor protección térmica o elegir el tipo de membrana.

Guantes de ciclismo para frío moderado

Teniendo en cuenta la subjetividad personal a la que nos hemos referido en el apartado anterior, podemos considerar frío moderado temperaturas por encima de 5º. El límite superior lo situaríamos en los 15º, porque, por encima de estas temperaturas, para la mayoría de los ciclistas ya no serían necesarios guantes específicos de invierno y bastaría con una ligera protección térmica, salvo con lluvia.

Para este rango de temperaturas, los guantes más recomendados son los que cuentan con membranas cortavientos, protección térmica ligera o moderada y que sean muy transpirables. Esta capacidad de evacuar el sudor con facilidad será su principal requerimiento, para poder afrontar confortablemente las cambiantes situaciones que afrontaremos, sin pasar frío y sin agobiarnos con la molesta sensación de tener las manos y los guantes empapados en sudor y excesivamente calientes, en las subidas, por ejemplo.

Los modelos más vendidos en esta gama utilizan membranas cortavientos Windstopper® o equivalentes, que encontraremos con distintas denominaciones como Softshell, Windprotect, etc.. Este tipo de membranas suelen tener propiedades hidrorepelentes para una lluvia ligera y esporádica o humedad accidental.

Si tenemos que montar con lluvia frecuentemente, aun con estas temperaturas, tendremos que plantearnos unos guantes con membranas impermeables como Gore Tex®, Outdry, Hipora® y otras similares. Pero estas son menos transpirables y os recomendamos que tengan una protección térmica muy ligera, para evitar el sobrecalentamiento y la humedad interna provocada por el sudor.

Dentro de la extensa gama de guantes de estas características que tenemos en Mammoth, hemos elegido como ejemplo dos modelos superventas de Endura por su excelente relación calidad-precio, que pueden servir de referencia o guía para nuestra elección, tanto de esta como de otras marcas:

  • Endura Windchill para MTB
Guantes Endura Windchill Guantes Endura Windchill
  • Endura Pro SL Windproof para carretera
Guantes Endura Pro SL Windproff Guantes Endura Pro SL Windproff

Guantes de ciclismo para frío intenso o extremo

Consideramos frío intenso cuando las temperaturas bajan ya de los 5º, y frío extremo cuando son inferiores a los -5º. Con estas temperaturas, tenemos que pensar ya en guantes con protección térmica alta o muy alta y un buen aislamiento mediante membranas de calidad.

Estos guantes llevan capas interiores de tejidos especialmente aislantes, que ya citamos al principio: Polartec®, Primaloft® y Thinsulate®, siendo el primero el más transpirable y los dos últimos los de mayor protección térmica.

Recomendamos elegir los guantes para la climatología habitual de cada zona, y solventar las excepciones con otros recursos.

  • En zonas con pocas lluvias, seguimos recomendando guantes con membrana cortavientos, eligiendo la capa térmica y el grosor del guante según las temperaturas habituales. Si no queremos tener un segundo par de guantes impermeables, para afrontar los días de lluvia, podemos buscar cubreguantes finos con membranas impermeables, que podremos usar con todo tipo de guantes y durante todo el año, con esos pocos días de lluvia.
  • En zonas húmedas, donde las lluvias son habituales, como el norte de España, nos decantaremos claramente por membranas impermeables. E, igual que con los cortavientos, elegiremos la capa térmica según las temperaturas. También es recomendable elegir modelos con las costuras selladas, para aumentar el tiempo de exposición al agua sin mojarnos las manos. E imprescindible que cuenten en la palma con materiales que ofrezcan buen agarre incluso con agua.

Con ambos tipos de membrana, usando guantes de protección térmica alta o muy alta, el mayor problema lo tendremos con variaciones de temperaturas muy grandes. Por ejemplo, en zonas de clima continental, como el interior de la península en situación de anticiclón. Se puede empezar una ruta con temperaturas por debajo de -5º, y acabar a mediodía superando los 15º positivos. Son circunstancias extremas difíciles de gestionar, pero os vamos a dar un truco para afrontar estas situaciones límite con cierto margen: elegid un guante adecuado para la temperatura media que vais a tener durante la jornada y añadid un guante fino como sotoguante, para afrontar esos primeros momentos de temperaturas extremas. Los podéis encontrar de diversos tejidos, como algodón, lana, seda o sintéticos. Y, aunque parezca que nos ofrecen poca protección, por la superposición de capas que explicamos al principio, reduciremos la temperatura de confort del guante entre 3º y 4º fácilmente. Aliviará notablemente el frío en esas primeras horas y podremos retirarlo cuando suba la temperatura.

Hay una gran variedad de guantes, tanto para frío intenso como extremo, en marcas de gran calidad. Destacamos a continuación algunos modelos de referencia, de ambas categorías.

Para frío intenso, con protección térmica alta, destacan, de nuevo, modelos de Endura superventas como el Endura Strike o el Endura Deluge, ambos impermeables. Y, con membrana cortaviento Gore Windstopper®, encontramos modelos como el Castelli Perfetto y el Sportful WS Esenttial 2, con una excelente transpirabilidad.

Sportful WS Esenttial 2 Sportful WS Esenttial 2


Para frío extremo, con protección térmica muy alta, encontramos modelos de excelente calidad, con resultados realmente sorprendentes. Entre los muchos que hay, podemos destacar: Endura MT500, Castelli Estremo y Assos Oires Ultraz Winter.

Endura MT500 Freezing Point Waterproof Endura MT500 Freezing Point Waterproof
Assos Oires Ultraz Winter Assos Oires Ultraz Winter

Guantes de ciclismo para diluvios

Si nos tenemos que enfrentar a jornadas con lluvia intensa y constante durante horas, acompañada de bajas temperaturas, hasta con los mejores guantes de membranas impermeables terminaremos con las manos mojadas y, muy probablemente, heladas. Para estas situaciones límite, os recomendamos los guantes de neopreno que son los únicos que os garantizan una temperatura de confort. Es el mismo material que el utilizado para buceo y deportes acuáticos, con menores grosores, para facilitar el agarre y control del manillar. Son muy efectivos, pero solo son aconsejables para esas condiciones extremas, pues no transpiran. Hay excelentes modelos de varias marcas como el Castelli Diluvio, Endura FS260-Pro Nemo Glove II, Gobik Tundra 2.0, o Sporful Neoprene, entre otros.

Endura FS260-Pro Nemo Glove II Endura FS260-Pro Nemo Glove II

Son muchas los opciones y modelos de guantes que podéis encontrar para disfrutar del ciclismo en invierno, sin que el frío o el agua os amarguen la salida. Encontraréis asesoramiento profesional y el mayor surtido de las mejores marcas en las tiendas Mammoth y en nuestra tienda online mammothbikes.com.

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