Qué revisiones necesita tu bicicleta

La salud de la bicicleta

Las revisiones y operaciones de mantenimiento alargan la vida útil de las bicicletas, pero, aún más importante, también garantizan que su funcionamiento sea siempre el óptimo y nuestra propia seguridad cuando montamos.

Los componentes de la bicicleta se van gastando y deteriorando, poco a poco, y van perdiendo propiedades y calidad de funcionamiento. Pero como suele ser un proceso progresivo, salvo en casos de averías o accidentes, nos vamos adaptando y no somos conscientes de esa pérdida de calidad en muchas ocasiones. Hasta que hacemos el necesario mantenimiento y nos damos cuenta de lo que nos estábamos perdiendo con una horquilla en mal estado o unas cubiertas demasiado gastadas o con presiones incorrectas, por ejemplo. Pero la peor cara de esta falta de revisiones es, sin duda, la relativa a la seguridad. Una transmisión muy desgastada, la tornillería floja, unas pastillas gastadas o un cierre de rueda mal encajado, por citar algunos ejemplos, pueden poner en riesgo nuestra propia integridad física.

Teniendo ya clara la necesidad de realizarlas, vamos a enumerar las revisiones periódicas que necesita nuestra bici y con qué periodicidad hay que hacerlas. Aunque los plazos temporales que citamos son solo aproximados y dependerán totalmente del uso que le demos a la bici.

Tomamos como referencia a ciclistas aficionados que hacen al mes entre 600 y 800 kilómetros, con bicis de montaña y gravel. Si hacéis menos kilómetros, podéis aumentar el plazo de revisión, proporcionalmente, pero sin superar nunca el plazo de un año sin hacer una revisión completa de la bici.

En las bicis de carretera, la vida útil de los componentes de la transmisión se alarga considerablemente, hasta el doble o el triple que los de montaña en algunos casos. Pero, os recomendamos hacer con la misma frecuencia las revisiones básicas de desgastes, apriete de tornillería y holguras, para prevenir incidentes en ruta o averías graves.

En el caso de ciclistas que compitan o superen ampliamente estos kilometrajes, dejan de ser válidos estos plazos y se acortan considerablemente, por las horas e intensidad de uso y por las condiciones de los recorridos. Y el caso extremo son los profesionales, cuyos mecánicos desmontan y revisan toda la bici, después de cada carrera.

Desgaste y sustitución de componentes

En las revisiones periódicas que recomendamos, iremos controlando el desgaste y estado de los componentes de la bici, que tendremos que ir sustituyendo, cuando alcancen un nivel de desgaste o deterioro determinado. Podréis encontrar tablas con intervalos de sustitución en kilómetros o tiempo de uso de estos componentes. Pero hay que asumirlas con las mismas reservas que hemos advertido en los plazos de las revisiones. Por eso, preferimos no utilizar tablas y recomendamos que uséis el estado real que observemos en las revisiones como indicador definitivo para el cambio.

Al final del artículo, en el apartado de Otros artículos y vídeos relacionados, encontraréis enlaces a vídeos específicos en los que explicamos cómo comprobar el desgaste de los componentes de la transmisión, frenos y neumáticos, para que sepáis identificar cuándo hay que sustituirlos.

Revisiones de la bici antes de cada salida

Para minimizar el riesgo de sorpresas desagradables, es muy recomendable realizar una revisión rápida de varios elementos, antes de cada salida. Y lo mejor es establecer un protocolo o rutina fija, para que la revisión sea más rápida y no olvidéis nada. Por ejemplo: ruedas, transmisión, tornillería del cuadro, dirección y suspensiones. Vamos a verlo en detalle.

• Neumáticos.- Revisar la presión y comprobar que no hay objetos clavados que puedan provocar pérdida de aire. Siempre es mejor retirarlos en casa y ver las consecuencias, para solucionarlo antes de salir.
• Llantas.- Revisar que los cierres de las ruedas estén bien apretados y que no hay holguras en los bujes. Palpar de forma rápida los radios con la mano, para asegurarnos de que no hay radios flojos o rotos.
• Frenos.- Comprobar su funcionamiento y asegurarnos de que no rozan en ninguna parte del disco o de la llanta.
• Transmisión.- Comprobar que la cadena está lubricada y que no hay holguras en pedales, bielas, platos y pedalier.
• Tornillería del cuadro.- Comprobar si están bien apretados los tornillos de la tija, el sillín, y el portabidón, y los puntos de giro del basculante, si se trata de una bici con suspensión trasera, para detectar holguras. Las holguras en cualquier componente, hay que detectarlas y solucionarlas cuanto antes, para evitar que provoquen averías o daños graves.
• Dirección y manillar.- Comprobar que gira correctamente y que no hay holguras. Y revisar los tornillos de sujeción de la potencia, tanto al tubo de la dirección como al manillar.
• Revisar las suspensiones, comprobando que funcionan correctamente y que no tienen fugas de aceite.

Con esta rápida revisión, detectaremos de forma preventiva la mayoría de las causas de averías y problemas durante las salidas.

Revisiones periódicas de la bicicleta

Con el perfil del ciclista medio que hemos elegido como referencia, deberíamos hacer revisiones periódicas que, además de las comprobaciones que hemos recomendado antes de cada salida, comprenda estas otras operaciones que indicamos cada mes, tres meses, seis meses o un año.

Revisión de 1 a 3 meses

• Limpieza y lubricación a fondo de la bici.
• Revisar el desgaste de la transmisión, prestando especial atención a la cadena, que deberíamos comprobar con un medidor específico y cambiar si este indica una elongación igual o superior a 0,75.
• Revisar el desgaste de los neumáticos y su estado general, comprobando si existen deformaciones o erosiones graves.
• Comprobar el desgaste de las zapatas o pastillas de freno, y el correcto funcionamiento de los pistones, en el caso de los hidráulicos.
• Revisar y ajustar la presión de las suspensiones, pues la estanqueidad total no existe y las cámaras de las horquillas y amortiguadores también pierden aire con el tiempo.
• Reponer o sustituir el líquido antipinchazos de los neumáticos tubeless, cada tres meses.

Los ciclistas más recreativos, con una carga de kilómetros notablemente inferior, podrán hacer todas estas operaciones cada tres meses.

Revisión de 6 meses a 1 año

Continuando con el perfil de nuestro ciclista tipo, ampliamos las operaciones que habría que hacer cada seis meses, aunque, para los ciclistas que utilizan la bici muchas menos horas, pasarán a formar parte de la revisión anual.

• Limpieza, engrase y ajuste de la dirección.
• Limpieza y lubricación de la tija del sillín.
• Desmontaje del pedalier, las bielas y los pedales, para revisar su estado, limpiar y engrasar.
• Revisión y ajuste de la transmisión: cambio, desviador, manetas y patilla del cuadro.
• Revisión de los frenos hidráulicos, con purgado del circuito y limpieza y engrase de los pistones.
• Mantenimiento de las suspensiones. Cada marca especifica el intervalo de mantenimiento de sus horquillas y amortiguadores en horas de uso, que suelen oscilar entre las 100 y las 125 horas, habitualmente. Con el tiempo de uso que estamos utilizando de referencia, recomendamos hacer el mantenimiento cada seis meses, al menos.

Y, para completar el mantenimiento de nuestras bicicletas, a las operaciones semestrales que hemos recomendado para la revisión semestral, que también serán anuales para los perfiles de ciclista más recreativos, añadiremos las siguientes operaciones en la revision anual:

• Revisión de los bujes, con ajuste y mantenimiento.

• Cambio de fundas y cables

• Sustitución del aceite mineral de los frenos hidráulicos, según la recomendación de Shimano y el resto de los fabricantes que lo utilizan. En el caso del líquido de frenos DOT, empleado por otras marcas como Sram, el plazo de sustitución es más generoso y lo podemos ampliar, si biene es recomendable el purgado.

Y también el mantenimiento específico para bicis eléctricas:

• Limpieza del compartimento del motor
• Limpieza y revisión de conectores
• Actualización del software

Tabla de revisiones recomendada para la bicicleta:

Resumimos todas las revisiones y operaciones de mantenimiento recomendadas en una tabla, para que sea más fácil planificar vuestra agenda de mantenimiento.

Tabla de revisiones recomendada para la bicicleta

Con estas revisiones y operaciones de mantenimiento, mantendremos nuestra bicicleta en las mejores condiciones y alargaremos notablemente la duración de los componentes y de la propia bici. Si, por alguna razón, no seguís estrictamente nuestros consejos, procurad que la desviación sobre estos plazos recomendados sea la mínima posible e intentad que no pase más de un año sin una revisión completa de la bicicleta y sus componentes, aunque la uséis poco.

En los talleres de todas las tiendas Mammoth, cuidan de vuestras bicicletas los mejores profesionales y ofrecemos distintos tipos de revisiones: Básica, Estándar, Pro y Pro eBike, con las operaciones y el precio de cada una de ellas perfectamente definidos y cerrados. Y también encontraréis todos los repuestos y componentes necesarios para mantener vuestas bicis. Tenéis toda la información en las tiendas Mammoth y en mammothbikes.com.

Otros artículos y vídeos relacionados

En los enlaces que os damos a continuación, accederéis a vídeos y listas de reproducción completas de nuestro canal de Youtube Mundo Mammoth, sobre la limpieza y lubricación de la bici, mecánica básica y cuándo cambiar los componentes de la transmisión, los frenos y las cubiertas.

• Limpia y engrasa tu bicicleta
• Mecánica básica de bicicletas
• Cuándo cambiar transmisión, discos, pastillas y cubiertas